Finalmente llegó un día que no pensé que llegaría. Metallica
desde el Snake Pit es una experiencia que te deja marcado. Tener tan cerca a
todos, ver las entrañas del show, cómo se prepara, la intimidad del escenario,
los técnicos afinando guitarras, James y Trujillo saludando cuando hacían
cambio de instrumentos. Fue una experiencia redonda, difícilmente volveré a
vivir algo asi.
Musicalmente, fue el día de la mayor sorpresa en lo que va
de la gira: Leper Messiah. También
regresó Fight fire with fire y el cover fue una increíble Stone Cold Crazy.
Pocas veces he estado tan feliz y realizado en un concierto.
Y para prueba basta un botón.
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